Muchas veces hemos oído hablar de "la Peste" y de grandes epidemias que diezmaron la población, son casos que hoy nos suenan lejanos, incluso raro, al escuchar el gran número de fallecidos que provocaba una "simple" epidemia de gripe, pero Valladolid, a lo largo de su historia ha sufrido unas cuantas.

Recordar que antiguamente los dos ramales de La Esgueva atravesaban la ciudad y eran utilizados muchas veces de vertedero, lo que fue origen, además de otras cosas, de muchas infecciones.

Según Juan Antolinez de Burgos en su libro "Historia de Valladolid", la primera epidemia recogida por los cronistas es la del año 1400, aunque desconoce de que fue, la refiere así:

"se apoderó de estos reinos un contagio tan fuerte que de él murió innumerable gente; obligó esta desventura y grave mortandad á que el Rey (de Castilla Don Enrique III el Doliente) estableciese y promulgase una ley en Valladolid, donde de ordinario tenía su corte, en que permitía á las viudas pudiesen casarse antes de cumplir el año de la viudez, derogando todas las leyes del derecho común y del reino que en orden á esto disponían lo contrario."

La peste llegó a la entonces villa de Valladolid en 1488, así como a finales de 1517 y principios de 1518, cuando murieron más de cuarenta personal al día, el rey Carlos I y la Corte salieron de la villa y la Chancillería se trasladó a Toro, según cuenta Matías Sangrador en su "Historia de Valladolid".

De nuevo hubo epidemia en 1578, y en 1580 y 1582 hubo una epidemia de "catarros malignos" que causó muchas víctimas.

En 1590 sufrió la ciudad un gran contagio de las llamadas "fiebres pestilenciales" provocando una gran mortandad, y de nuevo el rey, esta vez Felipe II, se marchó de Valladolid a Madrid con toda la Corte.

Pero en 1599, desde Flandes llegó a España y por supuesto a nuestra ciudad, que fue una de las más afectadas, una gran "peste de secas y carbunclos", dice Casimiro G. García-Valladolid, que producía la muerte de forma muy rápida. Marina Escobar, que participó muy activamente en la atención de los enfermos durante esta epidemia, la describe así en uno de sus escritos:

"á pocos días empezó á enfermar el pueblo y á morir mucha gente de tal manera que la Ciudad estaba alborotada y temerosa mucho, y con razón, no se encendiese alguna peste en ella por las señales que para esto había de grandes calenturas y secas .... En este tiempo iba muriendo en la Ciudad mucha gente de peste, de modo que casi setecientas personas morían cada semana, unas semanas más y otras menos ...".

Como los médicos no se ponían de acuerdo en la naturaleza de la epidemia, el rey Felipe III, con fecha 14 de junio de 1599, comisionó al médico vallisoletano Luis Mercado, Doctor, Catedrático de la Universidad y médico de cámara de Felipe II y de Felipe III, su estudio, el cual realizó y concluyó en el mes de agosto, con la publicación de su libro "De la peste".

En el mes de agosto, tres meses después a haber empezado, los médicos dijeron que aún sería peor en los meses de Septiembre y Octubre, pero a final de septiembre empezaron a bajar los contagios, hasta llegar a desaparecer  le enfermedad.

Imagen conseguida en la red

De nuevo en 1684 hubo otra gran epidemia que afectó a toda España. Rafael Floranes en su "Historia de Valladolid" dice que en una casa junto a la iglesia de San Andrés había le siguiente inscripción en el portal:

"AÑO DE 1684 FUÉ EL ECLIPSE GRANDE DE SOL, HUBO PESTE GENERAL DE GUSANOS LARGOS Y PELUDOS POR TODAS PARTES, Y EN VALLADOLID CERRARON LAS PUERTAS DE LA CIUDAD: MURIÓ MUCHA GENTE EN TODA ESPAÑA".

La siguiente fue en 1735 según dice Ventura Pérez en su "Diario de Valladolid":

"Año de 1735, día 20 de Noviembre pusieron en novena á Nuestra Señora del Sagrario en la Santa Iglesia Catedral Esta novena se hizo pidiendo á Nuestra Señora fuese intercesora con su Santísimo Hijo y alcanzase el alivio de innumerables enfermos que había en la Ciudad, y fué Dios servido que se experimentase un grande alivio".

En 1819 hubo una epidemia de viruela en la que murieron muchos niños.

En 1832 llegó "la peste del cólera morbo", que causó la primera muerte en la ciudad el 24 de julio, duró 36 días, mantuvo a la gente en sus casas por miedo al contagio y se saldó con 2.000 fallecidos en Valladolid.

En 1869 hubo una epidemia de tifus, y en 1885 de nuevo una de cólera que duró desde el 6 de agosto hasta octubre, hubo muchos fallecidos, pero gracias a las medidas higiénicas tomadas, el número fue muy inferior a la de 1832.

A finales de 1888 y principios de 1889, hubo una epidemia de gripe, entonces también llamada "del trancazo o dengue", que aunque la gente no la tomó muy en serio, causó cerca de 2.000 fallecimientos en la ciudad.

Afortunadamente, ya en el siglo XX y XXI, aunque ha habido epidemias de varicela, tos ferina, polio, gripe, y otras enfermedades contagiosas, debido a los avances médicos, el encauzamiento de La Esgueva, la construcción de nuevos hospitales, la mayor higiene, el agua corriente y muchas causas más, ninguna alcanzó la mortandad de las de siglos anteriores. Con la excepción de la terrible pandemia del COVID19, iniciada en diciembre de 2019 en China, y que ha provocado la paralización total del mundo, con todos los negocios y empresas cerradas, la gente recluida en sus casas, ciudades vacías en las calles, millones de infectados y cientos de miles de muertos.

Fuentes Consultadas

"Valladolid Recuerdos y Grandezas" de Casimiro González García-Valladolid

 "Historia de Valladolid" de Juan Antolinez de Burgos

"Historia de Valladolid" de Matías Sangrador

"Diario de Valladolid" de Ventura Pérez

10-03-2017

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