Hoy todos tenemos claro el terreno que ocupa la Plaza de Santa Cruz, o mejor dicho, la Plaza del Colegio de Santa Cruz, que es su nombre oficial. Pero la historia y formación de esta plaza está muy unida a los terrenos de dos calles actuales: la calle del Cardenal Mendoza y de la Librería.

En este detalle del plano de Ventura Seco de 1738 se ve la calle Librería, la Plazuela del Duque, el Colegio de Santa Cruz con su atrio marcado por pilares, el Convento de Belén, las casas que había en la hoy plaza y la Iglesia de San Esteban. Esto nos va a ayudar a entender lo que ahora iré contando.

La Calle de la Librería, antiguamente iba desde la Plaza de la Universidad hasta la Plaza de la Cruz Verde y se llamaba Calle de San Esteban, lógicamente por estar en ella la iglesia de San Esteban, exactamente en el lugar donde luego estuvo la iglesia de las Siervas de Jesús, es decir, la actual esquina de Alonso Pesquera con Pedro Barruecos.

Entre 1469 y 1472 se trasladaron las Escuelas, es decir la Universidad, desde su primitiva ubicación en la Colegiata a la actual calle de la Librería.

Puerta de entrada al antiguo edificio gótico de la Universidad

Fotografía conseguida en la red sin indicación de autor o procedencia

Luego, el tramo actual de Librería pasó a llamarse del Olmillo, más tarde por estar el edificio primitivo de la Universidad se llamó "calle de las Escuelas",  al menos hasta 1497. 

En 1523 se instaló en la calle el librero Andrés de Balera, y por ello, se supone, que pasó a llamarse Calle de la Librería.

Finalmente el tramo de la calle hasta Núñez de Arce quedó integrado en la plaza.

La Calle Cardenal Mendoza no existió como tal hasta el siglo XV, una vez construido el Colegio de Santa Cruz a instancias de dicho Cardenal. Pero sí existía la calle, o como queramos llamar, a este terreno que unía la actual calle de Colón con la entonces calle de San Esteban. Hay que recordar que entonces no estaba construido nada de lo actual, ni el Colegio de Santa Cruz, ni el Convento de Belén, ni por supuesto el Colegio de San José, solo había algunas casas, unas nobles y otras molineras edificadas en todo ese amplio espacio.

Entre la actual calle de los Reyes y la de la Merced había unas casas y terrenos que fueron de Diego Arias de Ávila, contador mayor de Enrique IV, que compró el Cardenal Mendoza para su palacio y para instalar el Colegio Mayor de Santa Cruz, que se inauguró el 25 de febrero de 1848.

Allí estuvo el colegio hasta 1492 que se trasladó enfrente, al magnífico edificio que hoy conocemos como Palacio de Santa Cruz, construido desde 1486, tras derribar unas casas que allí había.

Foto de una fotografía del Museo de la UVA

La plaza antes de la construcción del Colegio de San José

A partir de entonces al lugar se le comenzó a conocer como "Plazuela del Colegio Mayor de Santa Cruz", pero solo la parte delimitada por las columnas o pilares que formaban el gran atrio frente a la fachada, que se ve perfectamente en el detalle del Plano de Ventura Seco. Algunos de estos pilares se conservan.

Todos esos terrenos que había ocupado el primitivo colegio, fueron pasando por herencia y matrimonios, desde los Mendoza a los Sandoval y Rojas, hasta llegar al Marqués de Denia, abuelo de Francisco Gómez de Sandoval-Rojas, el Duque de Lerma.

En la foto el Colegio de Santa Cruz y a la derecha el Convento de Belén

El Palacio - Colegio en la actualidad

En este lugar, que luego ocuparía el Colegio San José, se fundó hacia 1538 el Convento de Belén de las monjas Bernardas, bajo el patronazgo de María de Sandoval, que luego pasó a su sobrino el Duque de Lerma.

El Duque de Lerma adquirió los terrenos contiguos al convento con la intención de edificar allí  su palacio, pero al comprar el edificio que hoy es el Palacio Real, desistió. El Duque, para compensar, aumentó en Julio de 1601 la dotación al monasterio, con la condición de que construyeran una nueva iglesia, que se inauguró el 3 de Noviembre de 1612.

La llamada Casa del Duque de Lerma y al lado la iglesia del convento de Belén

Fotografía conseguida en la red sin indicación de autor o procedencia

Junto al convento estaba la casa construida en 1568 por el licenciado Hernando de Santiso, relator de la Chancillería. Esta casa conocida como "de los Hijosdalgo", pasó en 1597 a ser propiedad del monasterio, que luego vendieron en junio de 1600 al Duque de Lerma. Pasó entonces a ser conocida como la Casa del Duque de Lerma, hasta su demolición a mediados del siglo XX, aunque no hay constancia de que la habitara en algún momento. 

Por el derribo en 1841 de la primitiva iglesia de San Juan Bautista, acogió la iglesia del convento de las monjas la parroquia.

Pasados los años, se derribó el convento por su mal estado, edificándose en el solar el Colegio San José entre los años 1882 y 1884, bajo la dirección de obras del arquitecto Jerónimo Ortiz de Urbina.

El Colegio de San José en sus primeros años

Postal conseguida en la red sin indicación de autor o procedencia

Fachada del Colegio de San José en la actualidad

El 16 de Noviembre de 1924 se hundió la capilla mayor, y finalmente, dado el mal estado en que había quedado, la iglesia fue derribada en 1930.

En los terrenos que ocuparon la iglesia y la llamada Casa del Duque de Lerma se realizó la ampliación del Colegio de San José.

Por estos edificios, se llamó "Plazuela de Belén" a la parte donde estaba el convento, y "Plazuela del Duque", más o menos lo que hoy es la esquina de la Calle Ruiz Hernández con la Calle Velardes, Colón y Cardenal Mendoza.

El 10 de abril de 1863, el Ayuntamiento acordó la división de nombres entre Plazuela del Duque y Calle del Cardenal Mendoza, para posteriormente llamar por este nombre toda la calle. Excepto el tramo donde está la fachada del Colegio de San José que ahora pertenece a la Plaza de Santa Cruz.

Frente al Colegio de San José, desde la esquina del Colegio de Santa Cruz hasta casi la calle Núñez de Arce, había un grupo de casas, que podemos ver en el anterior detalle del plano de Ventura Seco, que fueron derribadas hacia 1870, quedando todo despejado, casi como está en la actualidad.

A la izquierda del Palacio de Santa Cruz se encuentra el que fue Palacio de los Vitoria, construido en 1615. Ramón López de Tinco, propietario en ese momento, vendió el edificio el 31 de marzo de 1883 a la comunidad de Hermanas Carmelitas de la Caridad, donde actualmente continúa su colegio.

El antiguo Palacio de los Vitoria, luego Colegio de las Carmelitas

Detalle Foto de una fotografía del Museo de la UVA

El antiguo Palacio de los Vitoria en la actualidad, que por necesidades

del Colegio de las Carmelitas, vemos que ha crecido dos pisos y un anexo

Con los años, el Colegio o Palacio de Santa Cruz, ha albergado muchas cosas, una de ellas fue el Museo de Bellas Artes inaugurado en 1842, por lo que durante mucho tiempo se la llamó "Plaza del Museo". Nombre que incluso llegó a aplicarse las monjas y al colegio de las Carmelitas, ya que popularmente se decía "las carmelitas del museo" o "el colegio de las Carmelitas del Museo".

El claustro del Colegio cerrado y habilitado mientras fue Museo

El claustro en la actualidad

Frente al Palacio de Santa Cruz, estuvo la Casa de las Conchas, ya casi en la entrada a la Calle Librería. En 1899, la Universidad adquiere esta Casa de las Veneras o de las Conchas, que se utilizó para el Rectorado, secretaría y archivo. Hoy podemos ver parte de su claustro dentro del Edificio Tejerina en el Museo de la UVA.

Claustro conservado en la UVA

Casi al lado, estuvo también el famoso Observatorio de la Universidad. Edificio proyectad0o por el arquitecto Antonio Bermejo y Arteaga en 1902, tenía cinco pisos y treinta metros de altura y fue finalizada bajo las órdenes de Teodosio Torres hacia 1915.

La Plaza de Santa Cruz con el famoso observatorio de la Universidad

en la esquina con la Calle de la Librería

En esa misma acera, hacia la Calle Núñez de Arce hay una serie de casas de principio del siglo XX, que se han conservado. En una de ellas se encuentra desde hace más de 50 años la Casa de Galicia, muy frecuentada por los vallisoletanos.

Hoy, después de muchas remodelaciones, la Plaza del Colegio de Santa Cruz, que es su nombre oficial definitivo, con sus jardines y su amplia zona peatonal, es un lugar agradable para sentarse, pasear, admirar los edificios que la conforman, o para que los chavales al salir de los colegios puedan pasar un rato jugando.

Fuentes consultadas:

"Las Calles de Valladolid" de Juan Agapito Revilla, edición facsímil editada por Grupo Pinciano

"Valladolid Recuerdos y Grandezas de Casimiro G. García-Valladolid. Edición Facsímil Grupo Pinciano

"Guía de Arquitectura de Valladolid" dirigida por Juan Carlos Arnuncio Pastor

30-09-2022