Hoy cuando pasamos por la calle del Puente Colgante, en la misma acera de la Estación de Autobuses, nos llama la atención un edificio de ladrillo que parece una fábrica, y efectivamente lo fue, ahí estuvo el complejo de la Fábrica de Harinas La Rosa, propiedad de José García Lomas del Castillo y hermanos.

En 1906 se construyen los primeros edificios según planos del arquitecto Modesto Coloma, autor de otras muchas construcciones famosas de nuestra ciudad, como la Cerámica Silió, los edificios de la Calle Cánovas del Castillo nº 4 y nº 6, y algunos de la Calle Miguel Iscar o Platería, entre otros.

Entonces, la fábrica estaba situada en los terrenos del Ferrocarril Secundario, junto a la Estación Campo de Béjar, que fue la segunda que hubo en la ciudad y estuvo en funcionamiento hasta 1961. En el solar de la Estación Campo de Béjar es donde se encuentra hoy la Estación de Autobuses.

La fábrica tenía tres edificios: el almacén de trigo, la fábrica propiamente dicha y el almacén de harina.

En 1924 se realiza una ampliación del complejo, con nuevos almacenes, edificios y un patio. En los años 60 del siglo XX se añade un piso.

Como no entiendo nada de la fabricación de harinas ni de su maquinaria, para aquellos que si lo conocen transcribo lo que se indica que utilizaba para la fabricación, que debía ser lo más moderno, en "200 años de industria y comercio en Valladolid" de la Fundación Joaquín Díaz: "Se utilizó el sistema Daverio, movidas sus máquinas con energía eléctrica, patentado por la casa Daverio, Heinrich y Compañía, de Zurich y con una capacidad de molturación de 20.000 kilos diarios de cereal".

Está construida en ladrillo macizo cara vista y las entradas están en la calle Puente Colgante.

Las oficinas comerciales las tuvo en el nº 18 de la entonces Avenida de Alfonso XIII, es decir la actual Acera de Recoletos, que era su nombre original.

Desde la calle se ve el edificio principal de tres pisos, con mirador en el primero y balcón en el segundo. A cada lado hay un edificio de dos alturas, y al lado de estos uno a la derecha y dos a la izquierda ambos de una sola planta .Todos los edificios están rematados con frontón triangular.

En el frontón del edificio principal hay un relieve con una rosa, símbolo de la fábrica.

Actualmente no está en funcionamiento y los edificios están sin uso alguno.

Fuentes Consultadas

"200 años de industria y comercio en Valladolid" - Fundación Joaquín Díaz

Técnica e industria agroalimentaria en Valladolid (1900-1950): fábricas de harina y azucareras remolacheras de Julio Vega Ferrero

"Guía de Arquitectura de Valladolid" dirigida por Juan Carlos Arnuncio Pastor

13-09-2024

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